La escuela del siglo XIX, la que aún tenemos como institución heredada de la industrialización se describe: “Es un modelo basado en lo que el niño no logra hacer en lugar de lo que sí es capaz de hacer….valoriza más la capacidad sobre el proceso; los grupos homogéneos sobre los heterogéneos; la competitividad en lugar de la cooperación; el individualismo en lugar del aprendizaje solidario, los modelos comprensivos cerrados, rígidos e inflexibles en vez de proyectos educativos abiertos, comprensivos y transformadores; se apoya en desarrollar habilidades y destrezas y no contenidos culturales y vivenciales como instrumentos para adquirir y desarrollar estrategias que nos permitan resolver los problemas de la vida cotidiana.
Esa postura es un problema ideológico, porque lo que esconde detrás de esa actitud es una no aceptación de la diversidad como valor humano y la perpetuación de las diferencias entre alumnos, resaltando que estas diferencias son insuperables”
Francisco Rubio Jurado – Principios de normalización, integración e inclusión”
http://www.csi-csif.es/…/Numer…/FRANCISCO_RUBIO_JURADO02.pdf
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